Zarzuela House
Situada en una zona tranquila residencial de la localidad de Dos Hermanas, muy cercana a Sevilla, la casa se asienta en una parcela rectangular de 556 m2 situada en la esquina de confluencia de dos calles de pequeña escala. El programa requerido por la propiedad consistía en una vivienda de dos dormitorios, con una amplia zona de día donde se asignara un importante protagonismo al hogar o chimenea. La normativa urbanística del área impone una serie de parámetros (una planta de altura más ático, cubiertas inclinadas, separaciones a linderos…) que definen una volumetría casi inevitable. La propuesta asume este volumen impuesto y trata de llevarlo hasta la sencillez esencial de la forma arquetípica, generando una imagen clara y potente, que se refuerza mediante el uso exclusivo de un único material, el ladrillo de manufactura belga. La unión de este volumen arquetípico con una caja exterior de hormigón visto, que actúa como elemento de transición hacia el jardín perimetral y protección climática, produce un concepto final híbrido y sugerente, sencillo y duradero. El programa se resuelve colmatando la planta principal disponible con el área de día organizada en torno a una pieza central escultórica, formada por un muro de hormigón visto al que se adosan a ambos lados la chimenea y una escalera volada. Los dormitorios: el principal y el de los hijos se sitúan así mismo en este nivel de acceso. La planta superior se destina a trastero y almacenaje, a modo de desván que, encajado bajo la cubierta inclinada, se abre en galería sobre la doble altura de la sala de estar. La casa se completa con una planta semisótano destinada a instalaciones, almacenaje y a la afición principal del propietario: la colección y reparación de motocicletas clásicas. La imagen exterior resulta una pieza rotunda y cerámica, con pocos huecos aunque de dimensiones generosas, que se abren hacia el jardín que rodea la casa, a través del pórtico de hormigón que la rodea y protege, y que levita sutilmente sobre el perímetro ajardinado, equilibrando la densidad material de la forma construida. Se han contemplado en el proyecto conceptos bioclimáticos sencillos pero eficaces, sistemas pasivos propios de la mejor arquitectura vernácula, como el propio diseño y orientación de los espacios y la protección solar de la envolvente, fundamental en un clima extremadamente caluroso como éste, así como otros más contemporáneos, tales como la disposición exterior del aislamiento, sistemas de climatización altamente eficientes y huecos resueltos con carpinterías de alta calidad que permiten minimizar las pérdidas energéticas.