El encargo es una casa de fin de semana ,se encuentra en la localidad de San Vicente en un terreno frente a una laguna. La búsqueda proyectual consistió en conformar espacios a través de planos verticales que buscan proteger al hombre de los fuertes vientos pampeanos del sur , otorgar privacidad para espacios exteriores y generar recortes del paisaje. Materializados de la misma forma tanto en interior como en exterior para así borrar este limite , uno de estos planos interiores es un mueble que divide al mundo privado del publico generando una aislación acústica por su condición de mueble con objetos. Por otro lado un plano horizontal es la cubierta, que genera sombras hacia la galería en verano e ingreso de sol en invierno , nos protege de las lluvias y se puede ascender a ella a contemplar el horizonte por un elemento que atraviesa a la misma y vincula el mundo del 0.00 con el de la azotea. Los planos verticales y el plano horizontal están separados por un vacio que deja en evidencia sus independencias estructurales.