Se rediseña los espacios nobles y servicios de las instalaciones del apartahotel. Manteniendo criterios similares a la primera fase donde se renovaron los apartamentos y piscinas, esta nueva fase consigue explotar al máximo la fluidez espacial y la transparencia como nuevos valores.
De nuevo madera lacada en blanco, vidrio, acero cortén y el color como protagonistas de la materialización de la transformación. A lo que se añade una gran sombra perimetral que protege del exterior y proporciona cobijo y confort al cliente.