Jardín Infantil Santo Domingo Savio
a. Adaptación a la topografía y al barrio Ante la presencia de un suelo inclinado (22% de pendiente) y rocoso este proyecto optó por una estrategia modular que pudiera adaptarse a la topografía evitando el uso costoso de dinamita para romper las rocas existentes. Por este motivo el proyecto se arma en tres niveles que se van conectando por rampas cubiertas, y se articula al barrio existente evitando demoliciones y cumpliendo una estricta norma de retiros y distancias mínimas.
b. Modularidad y crecimiento Una estrategia modular de piezas flexibles permite configurar el Jardín infantil en torno a una cabeza compacta de tres niveles y a una cola superior y longitudinal de un nivel. El espacio de la cabeza en la que se ubican los niños más pequeños gira en torno a un patio introvertido, y el espacio de la cola en el que se ubican los niños mayores define una terraza longitudinal de juegos y observación del paisaje.
c. Materiales y acabados Las Construcciones del Barrio Santo Domingo normalmente son viviendas de autoconstrucción en ladrillo rojizo y cubiertas planas de hormigón que permiten el crecimiento vertical en el tiempo. Poco a poco estas edificaciones van creciendo en altura y van cambiando su aspecto rojizo por revoques y pinturas de colores diversos que sus habitantes disfrutan y entienden como obras de mayor calidad. Debido a la situación anterior quisimos que el proyecto evidenciara sus cambios de niveles, escalonamientos y su diversidad e irregularidad geométrica, así como su acabado en muros de granito lavado en tonalidades de azul y verde con la intención de que la nueva infraestructura pública se reconozca fácilmente pero a su vez se articule de manera orgánica a la vida del barrio.