Torre de compensación de la Estación de Bombeo de ATLL-Fontsanta
Parque de la Fontsanta - Pont Reixat
Presentación
El parque de la Fontsanta en Sant Joan Despí aloja una infraestructura territorial que abastece de agua Barcelona y su Área Metropolitana. El proyecto de la torre de compensación nace de la voluntad de la correcta inserción de estas infraestructuras de agua potable dentro del paisaje urbano, por parte de la empresa pública de la Generalitat Aigües Ter-Llobregat. Además de la estación de bombeo presente en el margen del parque, se construyó la torre de compensación para equilibrar la presión del agua. Un sencillo cilindro de hormigón se deja cubrir por una envolvente ligera cuya variedad de pigmentos genera una multitud de percepciones en su entorno cercano y lejano. La actuación pretende convertir un objeto funcional en icono para la empresa y en referente urbano para su entorno.
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Contexto
De su ubicación en el punto de articulación del parque de la Fontsanta y la topografía que toma el parque a su pie surge la necesidad de convertirse en objeto singular, a la vista de todos desde cualquier punto. El reto, dotar al objeto formal, que es el núcleo de hormigón, de una piel capaz de actuar y reaccionar frente a su contexto.
Se trata de cubrir sin esconder. La torre cubierta es una infraestructura que asume su presencia. Compuesta por un cilindro de hormigón postensando con un muro de 40 cm de grueso y 35 m de altura, lleva una piel ligera, cuya transparencia facilita la comprensión de un objeto funcional encontrando su lugar dentro del Parque de la Fontsanta.
Concepto
La mayor parte de la “pigmentación” de la piel resulta de la colocación de módulos de chapa de aluminio deployées (deployer). La composición se hizo a partir de tres variables: Primero los tamaños de abertura de las chapas permiten conseguir un gradiente de transparencia. Por otra parte, los tres colores de chapa (bronce-oro-aluminio) establecen una jerarquía vertical, desde la tierra hasta la luz. Por último, se aprovecha la orientación de los huecos de la chapa colocándola hacia arriba o hacia abajo, de manera que favorece o disminuye los brillos y la permeabilidad visual de cada pigmento según el lugar de observación y las condiciones del momento y del entorno. Así, se consigue con la colocación de este material, un objeto sensible al medio, ya que va a ser el propio medio que materialice el objeto.
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Estructura
El objeto es compuesto en dos fases. La primera se trata del propio depósito de equilibrio, compuesto por un cilindro de hormigón postensado con dos tendones concéntricos y diametralmente opuestos que absorben gran parte de las solicitaciones estructurales de los 35 m de la columna de agua. La segunda fase la compone la propia piel de la chimenea de equilibrio. Dado el sistema constructivo adoptado para el núcleo de hormigón, la piel que lo envuelve se sostiene desde la cima de la chimenea para colaborar, con su propio peso, con el núcleo de hormigón. La piel está sostenida por una estructura radial de acero galvanizado depositada en la coronación de la torre. Esta corona estructural aguanta las 32 costillas verticales que se desarrollan alrededor del núcleo de hormigón soportando cada pigmento de la fachada y conformando las pasarelas de mantenimiento. El sistema estructural actúa como un pentagrama formado por un despiece modulado. Transmite a la piel un marco de actuación vertical y ofrece una gran versatilidad de composición.
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Contorno
Cada costilla se prolonga más allá de la corona hasta 38.5 m de altura total. Cada tira de pigmentos tiene un límite superior variable para dar al envolvente un contorno difuso, sin un fin claro. Este hecho, mantiene la torre en un registro únicamente vertical y le confiere su carácter formal. La irregularidad encuentra un punto alto en la fase de los paneles fotovoltaicos. La ligereza del conjunto tiene como consecuencia que la piel y su esqueleto nunca alcancen la base y permite resolver sencillamente el encuentro con el suelo. Algunas plantaciones de lonicera japonica, de bougainvilla y otras plantas trepadoras suben mediante un cableado hasta la piel para ir colonizándola lentamente.
Fotovoltaicos
Las pautas de ordenación de la transparencia y de los colores han sido establecidas de manera que se inserten los paneles fotovoltaicos sobre la cara sur de la torre, entrando así en el diálogo compositivo. Los pigmentos fotovoltaicos grises y azules forman una caída parecida a un “chorro de agua” desbordando el depósito.
La composición por pigmentos del envolvente convierte este objeto en un “barómetro” cuyos materiales dialogan y reaccionan singularmente según la hora del día, las condiciones climáticas y el punto de vista, consiguiendo así una materialización dinámica en relación con el medio. A la vez esta piel se alimenta del medio para producir su propia energía.
Leds
Si las costillas verticales aparecen y desaparecen durante el día según las condiciones de percepción, por la noche sirven de soporte de difusión lumínica mediante la implantación de un sistema de leds. La envolvente se convierte entonces en una pantalla cuya resolución esta modulada por cada costilla y emite animaciones abstractas relacionadas con el agua (como la evaporación, las precipitaciones o la imagen corporativa de la empresa). Es entonces cuando aparece otra materialización nocturna de la torre que ofrece nuevas percepciones en su ámbito urbano.