El edificio está en la rue Saint Laurent en lo que se conoce como el pentágono de Bruselas, la ciudad antigua donde se encuentran gran parte de los edificios que forman la memoria y corazón de la capital Belga. Así pues a pocos metros encontramos la Grand Place, la catedral, la Bolsa y justo al lado lo que hoy es La bande Dessinée en los almacenes de Victor Horta.
En 1886 “Le Peuple”, cooperativa socialista, nace con el fin de editar un periódico, y se asienta en 1892 , con la constitución de la sociedad cooperativa “La Presse Socialiste”, en la Rue des Sables. Se van añadiendo nuevos edificios y uno de ellos se rehace entero por parte del arquitecto Pringiers discipulo de Horta, sigue las corrientes modernistas, con cierto rigor y contención formal, ocupando parte del patio trasero (1905).
En 1931 Fernand y Maxime Brunfaut llevaran a cabo el proyecto de extensión que dara cara a la Rue Saint Laurent cambiando además la estética del los locales de la Rue Les Sables. Se siguen realizando pequeñas incorporaciones, 1937 ampliación tanto en Rue Saint Laurent como Les Sables pero el edificio prácticamente queda colmatado.
El periódico “Le peuple” deja de aparecer en 1940 hasta el 44 donde reaparece ya como órgano cotidiano del Partido Socialista Belga. Desde el 45 sigue en estos locales sostenido por la Prevoyance Social hasta 1968. Entonces pasa a manos del partido socialista, rehaciendose ya sin mucha fortuna la fachada principal. En el 1974 el periódico ya no se imprime allí aunque la dirección permanecerá hasta el 1977. El año siguiente se abandona el edificio. A partir de ahí tentativas de demolición, frenadas por protestas públicas (Archives Saint Lucas).
Se consigue la protección de la fachada principal de los Brunfaut a la Rue Saint Laurent y la fachada de la de Pringiers a la Rue Les Sables. A partir de ahí propuestas inmobiliarias en las que estas fachadas aparecen como decorado añadido a enormes planteamientos edificatorios. Junto a la importancia arquitectónica del edificio vemos pues que Le Peuple, La Presse Socialiste, tuvo una gran importancia en la historia social y la gente nos paraba para decirnos que contentos estaban viéndonos recuperar el edificio.
La historia de los Asturianos en Bélgica empieza poco después de realizar el edificio principal los Brunfaut. Asturias fue una región decisiva en la lucha de los derechos de los trabajadores en España. Muchos de los Asturianos tuvieron que emigrar tras la guerra civil. Nuestra tierra, una tierra minera emigró a zonas mineras como Wallonia. Hay alrededor de 12000 asturianos en Bélgica (nacidos aquí o hijos de emigrantes), guardan un gran cariño por su tierra y es importante para Asturias que estén allí bien representados. En el año 2001 el Principado de Asturias compró el inmueble que da frente a la calle Saint Laurent, el del edificio torre y a partir de ahí lo restauramos.
Aparte del Art Noveau de Horta (a lo sumo Paúl Hankar) sabemos el puente que supuso Van de Velde acercándonos al movimiento moderno, pero es difícil que nuestra información vaya más allá de Victor Bourgeois, o quizás De Koninck. Sin embargo parece lógico que un centro de gravedad entre Holanda, París y Alemania debe recibir todas las influencias del mundo en el período de entreguerras y que no es casualidad la innumerable cantidad y sobre todo calidad de edificios de estos años que van salpicando todo el tejido de la vieja Bruselas (no la de la nueva capitalidad).
Pensábamos al inicio que quizás no hubiera como en Holanda agrupaciones en torno a publicaciones como de Stijl o Wendingen que hubieran aglutinado este movimiento moderno desmelenado con gran libertad tanto en la composición como en la elección de los materiales. Pero no es así, varias revistas específicas difundían el esplendor arquitectónico. Como nos indica el historiador Jean Marc Basyn (): “ La publicación de numerosas revistas (La Cité, 7Arts, l´Art Libre, Le Document, Clarté, Bâtir), la fundación del Instituto superior de artes decorativas (La Cambre) en 1926 por Henry Van de Velde siguiendo el modelo de la Bauhaus, la organización del tercer Congreso Internacional de Arquitectura Moderna (CIAM) en 1930 bajo la dirección de Victor Bourgeois y numerosas construcciones de la Exposición Internacional de 1935 son algunos testimonios de la vitalidad del movimiento moderno en Bruselas”
Así pues el importante edificio llevado a cabo por Fernand y Maxime Brunfaut en los inicios de los treinta, “Le Peuple”, no es una casualidad ni por su situación, Bruselas, ni por la biografía de los autores. Fernand discipulo de Horta, hermano de Gastón Brunfaut (colaborador en el edificio de Naciones unidas de Nueva York, participante de los CIAM), y Maxime un brillante arquitecto como muestra su legado y como muestra el giro de modernidad que representa en la obra de su padre. Debemos citar varios edificios suyos que hemos analizado, haciendo especial hincapié en los que pudimos estudiar in situ. El Vooruit! en Gante es el padre directo de Le Peuple, también ha sido restaurado hace pocos años, en este los acabados son más ricos pero el movimiento moderno aun no es tan patente en la solución construida como lo será en Le Peuple, donde intuimos la importancia del recien titulado Maxime. También nos sorprendieron los ricos acabados de la Prevoyance Sociale en la Plaza de l Aviation en Bruselas con sus suelos tan deliciosamente diseñados (no tuvimos tanta suerte en Le Peuple). Visitamos también el Sanatorium en Tombeek, y por supuesto disfrutamos del colorista aeropuerto de Bruselas en nuestros primeros viajes (Maxime), no tan brillante y limpio como el moderno, pero lleno de frescura y alegría de diseñar.
Por otro lado estudiar La maison de Verre (1935) de Paul Michel Amaury (que por supuesto había estado en Paris con Chareau) recientemente restaurada con preciosismo por Bernard Baines, ver la obra de Diongree en especial el edificio de la radio de Ixelles también restaurada hace pocos años por Phillipe Samyn, o ver los edficios de de Koenig, de Adriam Blomme, de Bodson, de Bourgeois, de Stynen…de tantos otros que van salpicando y enriqueciendo todo el tejido construido bruselense es una delicia para cualquier arquitecto o historiador de lo moderno.