VIVIENDA UNIFAMILIAR EN SANT ANDREU DE LLAVANERES
El desafío de diseñar una casa unifamiliar que debe situarse en un solar de marcada pendiente comienza en asumir como un riesgo la decisión sobre cómo posicionar el nivel donde va a situarse la planta de contacto con el suelo. Se genera una situación de ambigüedad sobre cómo denominarla a fin de poder describirla adecuadamente: planta baja, planta de acceso, planta piso… Esta necesidad de precisión semántica a la hora de definir los distintos niveles del edificio resultó crucial en el momento de establecer los usos y programas de esta vivienda.
En este caso, se opta por situar la casa considerablemente por debajo del nivel superior de la parcela, justamente en su nivel de acceso, y ‘colgarla’ materialmente hacia la pendiente a fin de trazar su encuentro con el terreno a un nivel medio de la parcela.
La casa se manifiesta como un sencillo muro de madera, con poco más de tres metros de altura desde su acceso, siendo un cubo de vidrio transparente el único elemento visible que remarca el acceso a la vivienda. Del otro lado de dicho muro, como “colgada” en la pendiente, aparece la casa.
Concebida como un gran bloque de piedra caliza blanca con una serie de vacíos y de volúmenes esculpidos en su masa, la casa desarrolla su programa funcional en tres niveles. El nivel superior, acceso a la vivienda, ubica un garaje y la suite principal. El nivel intermedio, diáfano, se articula alrededor de un volumen de vidrio que contiene un baño, y se proyecta un doble espacio sobre la sala y el jardín a través de unos ventanales de gran dimensión. El nivel inferior, el que conecta con el jardín que define el ámbito exterior de la vivienda, contiene la cocina y la sala de estar-comedor totalmente abierta y buscando claramente una vinculación con dicho ámbito exterior.
Una pérgola-brise soleil crea un espacio de porche que actúa como filtro hacia el jardín y que, creando mediante un suave gesto la impresión de levantar ligeramente la casa de su contacto con el suelo, proporciona una sensación de dominio visual y de ingravidez que acentúan su calidad espacial.
También el espacio exterior, con una importante piscina colocada en el perímetro en contacto con la pendiente y el talud, se ha llevado al límite para intensificar la sensación de proyección sobre el vacío de la pendiente del terreno.
El proyecto de una casa colgada, que sólo puede apreciarse en su integridad desde la distancia, pero que, percibida desde la cercanía, desaparece, para ir convirtiéndose en un sencillo muro que no permite intuir qué sucede al otro lado.